El Parque Natural de Despeñaperros y el Paraje Natural de la Cascada de Cimbarra están situados en el norte de la provincia de Jaén y presentan una superficie de 7.649 y 534 hectáreas, respectivamente. Fueron declarados en 1989 Parque Natural y Paraje Natural por la Junta de Andalucía. La presencia de hábitats de especies de interés llevó a la inclusión en 2002 dentro de la red de Zonas de Especial Protección, pasando así a formar parte de la red europea de espacios protegidos Red Natura 2000. El rasgo orográfico más destacado del área es la denominada Cuerda de Despeñaperros, formada en su mayoría por rocas de la era Paleozoica, que está atravesando de norte a sur por desfiladeros o cañones como el Desfiladero de Despeñaperros y la Cascada de la Cimbarra. Una pluviometría anual no excesiva, junto a las características hidrogeológicas de las rocas que conforman la geología de la zona, hacen que el agua sea un factor condicionante de primer orden, en cuanto a la flora como a la actividad humana en el parque. La importancia de los manantiales en los espacios naturales queda patente en el mantenimiento de estos caudales circundantes en los periodos de estiaje en los principales ríos de la zona.