La hidrología subterránea era una disciplina que solamente atraía la atención de un grupo reducido de investigadores de las ciencias de la Tierra y de la ingeniería. En la actualidad el número de personas interesadas por las aguas subterráneas, en los campos científico, técnico, socioeconómico, administrativo y legal, es ya importante, y se está produciendo una clara toma de conciencia de su importancia intrínseca y de su papel esencial en el ciclo hidrológico y de su interés social y económico, tanto en los países desarrollados como en aquellos en vías de desarrollo. El origen de esta obra debe buscarse en el Curso Internacional de Hidrología Subterránea que se realizó en Barcelona en el año 1966.