ISLAS DE HIELO. ANTÁRTIDA

ISLAS DE HIELO. ANTÁRTIDA

NATURALEZA, PRESENCIA HUMANA Y PAISAJE EN LAS ISLAS SHETLAND DEL SUR.

19,00 €
IVA inclòs
Disponible
Editorial:
UNIVERSIDAD DE VALLADOLID
Any d'edició:
Matèria
Conservación y Biodiversidad: General prov.
ISBN:
978-84-8448-468-4
Pàgines:
450
Enquadernació:
Rústica
Idioma:
Castellano

"Islas de hielo. Naturaleza, presencia humana y paisaje en las Islas Shetland del Sur(Antártida)" es una geografía de un archipiélago antártico que explica los elementos clave de la naturaleza y la huella humana en estas islas heladas. Entender esta porción de la Antártida es comprender un medio natural formado por los materiales de un archipiélago volcánico, las formas y procesos que han configurado el relieve, la existencia de glaciares, las amplias plataformas de origen marino, la presencia del permafrost, un clima definido por la existencia de frío y también la humedad, -un hecho que define esta región antártica frente al resto del continente-, y una vegetación adaptada a las rigurosas condiciones ambientales, y que enriquece el medio con un elemento inexistente en el resto del continente.Este marco natural, de gran belleza y expresividad, ha sido objeto de exploración y se ha ocupado parcialmente para la obtención de recursos. La extracción de minerales, las pesquerías, con la ballena en primer lugar, y la caza de focas dieron lugar a intereses geopolíticos y estratégicos que conformaron una red de asentamientos dispersa por el archipiélago. Más tarde los científicos, estudiando el planeta (la atmósfera, las placas litosféricas, el clima) o la Antártida (su geología, su clima, sus glaciares y ambientes geomorfológicos, la fauna y la vegetación) han ocupado también el archipiélago mediante bases y estaciones científicas. Ya muy recientemente la actividad turística, emprendida por empresas privadas y estatales con importantes intereses comerciales, ha surgido con ímpetu. Hoy día los turistas superan con su presencia las ocupaciones previas, en un proceso muy dinámico: de hecho, en la actualidad es la actividad económica más importante de la Antártida.