Durante largo tiempo se ha discutido sobre la cuestión de la producción de vino en el Imperio romano y se han propuesto modelos diversos que, de un modo general, se explican a partir del sistema de grandes uillae. Dedicadas al monocultivo del vino destinado al consumo de grandes centros, eran explotadas en un sistema esclavista. El objetivo de esta obra es aportar una nueva perspectiva sobre la producción de vino en el contexto romano y entender qué tipo de estructuras organizativas hacían posible el abasto de dicho producto en los mercados. A través del análisis sincrónico y diacrónico de la región noreste de Hispania, se desarrollan y se proponen modelos de producción especializada. El resultado es la actualización de un estudio que, en ocasiones, se había simplificado y que aquí se muestra en toda su complejidad.