Estepa y ribera son los dos elementos que definen el entorno natural de la Ribera Baja del Ebro. La llanura cerealista salpicada de mases y parideras es el paisaje dominante en "el monte", con parches de matorral xérico sobre yeso o caliza allá donde el relieve no ha dejado entrar al arado; hay también bosques, sabinas en La Reuerta y pinar en la sierra de Alcubierre y en los montes de Sástago y Escatrón; las saldas, verdaderas joyas naturales, completarían lo que es prácticamente un paisaje africano en Europa. Y el Ebro, vertebrando la comarca y siendo razón de ser de sotos, galachos y carrizales que se yuxtaponen a la aridez.
Contiene mapa comarcal a escala 1:125.000.