Reunimos en este libro dos de los textos más bellos y menos conocidos del autor de Walden: «Un paseo invernal» relata una caminata inolvidable por el corazón de los Grandes Fríos hacia la primavera de la existencia; «Caminar» es un ensayo magistral sobre el arte del paseo y una defensa cerrada de la vida salvaje y libre, tanto de los animales como de los seres humanos.
«En la profundidad del bosque, completamente solos, mientras el viento sacude la nieve de los árboles y dejamos atrás los últimos rastros humanos, nuestras reflexiones adquieren una riqueza y variedad muy superiores a las que ostentan cuando estamos inmersos en la vida de las ciudades. El zorzal y el trepador son una compañía más estimulante que la de políticos y filósofos, a los que volveremos a ver como quien se reencuentra con unos viejos y vulgares compañeros. En este valle solitario, en el que un riachuelo desagua las laderas cubiertas de hielo estriado y cristales de infinitos matices, entre los que sobresalen los juncos y la avena salvaje, y se elevan los abetos y las tsugas, nuestra vida es más serena y verdaderamente digna de contemplación».