Situado en pleno Pirineo, el Valle de Roncal es el punto donde se unen Navarra, Aragón y Francia y se nos presenta como un territorio de naturaleza en estado puro, con una historia milenaria y tradiciones ancestrales que por sí solas ya merecen una visita. El de Salazar es otro de los valles navarros donde el predominio de las hayas caracterizan su paisaje. Ofrece un entorno apenas maleado por la mano del hombre, donde destaca especialmente la selva de Irati, la mayor mancha forestal de Navarra y el segundo hayedo abetal más extenso y mejor conservado de Europa.