María Sánchez se ha convertido en una de las voces más reconocidas en la defensa del mundo rural y en la dignificación de su cultura. De ese afán nació Almáciga, un proyecto colaborativo en el que ha ido recogiendo palabras asociadas al campo para que no caigan en el olvido. La recolección ve la luz ahora en forma de libro, un glosario poético que huele a tierra arada y a lumbre, iluminado con las bellas ilustraciones de Cristina Jiménez.
El campo y nuestros medios rurales tienen una manera de hablar única que hermana territorio, personas y animales. Muchas de sus palabras llevan demasiado tiempo a la intemperie. Si no las cuidamos, morirán con nuestros mayores y nuestros pueblos. Por eso este libro, esta almáciga. Un sustrato donde las expresiones de nuestras tierras descansen; una semillera para recuperar sus palabras y sus significados, para volver a oírlas y nombrarlas, para que arraiguen entre nosotros y las tengamos más cerca; un vivero en el que mimarlas y cobijarlas con nuestros cuerpos y acentos. Un diálogo-tejido con nuestro medio rural para que germinen y puedan volver a existir.