El Parque Natural de la Sierra del Castril, con 12.696 hectáreas, se sitúa en el extremo oriental de la provincia de Granada y está formado por un conjunto de relieves de dirección NE-SO que enlazan con el conocido Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas, en la provincia de Jaén. El sistema hidrológico más singular del Parque está señalado por el nacimiento y cabecera del río Castril con un notable encajamiento de la red fluvial y la proliferación de gargantas, cascadas y saltos de agua en relación con el cauce principal. La morfología kárstica debida a la acción del agua y la nieve que caracteriza el paisaje y la singular fauna y flora, motivaron la declaración de Parque Natural en 1989, además de la catalogación del espacio como Zona de Especial Conservación y de Especial Protección para las Aves. Destaca el fuerte contraste entre las altiplanicies llanas como Sierra Seca y las fuertes pendientes de las laderas en cuyos pies se sitúan los cauces fluviales. Las peculiaridades climáticas del espacio y la subsistencia de una fauna y flora relevante, en gran parte se debe a la presencia constante y abundante de agua subterránea que se presenta en las formaciones calcáreas, dando lugar a uno de los reservorios de agua más importantes de Andalucía.