La alianza del hombre y el caballo es el resultado de la existencia de una relación de confianza entre ambos basada en el respeto recíprocos.
Para generar esta relación se necesita una buena comunicación, que resultará de aplicar el lenguaje y las leyes naturales que rigen la convivencia entre los caballos que viven en libertad.
El objetivo de este sistema de doma o adiestramiento será conseguir un animal obediente, atlético, flexible y capaz de obedecer a la señal más sutil.