CABRERA NAVARRO, DANIEL / GIJÓN MENDIGUTÍA, Mª DOLORES
Son apenas quince kilómetros los que separan, en la parte más angosta del estrecho, España de Marruecos, pero viajar al país magrebí sigue siendo una experiencia exótica, variada y sorprendente. Marruecos ofrece, a nivel natural y paisajístico, miles de kilómetros de costa, majestuosas montañas y la inolvidable nada que es el desierto del Sahara, pero seduce tanto o más por su milenaria cultura y el carácter hospitalario de sus habitantes. De sus ciudades más monumentales impacta sin duda el ritmo de las zonas antiguas. Y es que los mil años de historia de Fez o Marrakech parecen estar contenidos en cada rostro, cada vivienda, cada pequeño suceso que presenciamos en la medina. La experiencia viajera se puede completar con la estancia en un bonito riad y la degustación de la excelente gastronomía marroquí