Este libro explora el valor de la llamada ropa «a la morisca» en los siglos XVI y XVII en la Península Ibérica. Por un lado, la nobleza usaba vestimenta «a la morisca» en una gran variedad de contextos festivos. Por el otro, las prácticas vestimentarias de los moriscos eran objeto de una persecución creciente. Esta ambivalente situación de la ropa «a la morisca» ha sido estudiada a través del prisma de la identidad cultural y ha sido por lo tanto considerada como una suerte de contradicción ideológica. Es posible resolver esta aparente paradoja ideológica desde la perspectiva de la cultura material, considerando en primer lugar el valor de distinción social que se atribuía a estas prendas. Este acercamiento explica por qué la movilidad social está asociada con la ropa «a la morisca» en la Edad Moderna, y revela al mismo tiempo que el objetivo de la legislación suntuaria contra los moriscos no era meramente la represión de una identidad cultural particular, sino una forma de dificultarles el acceso a los tejidos de lujo y los signos de distinción propios de la sociedad española del siglo XVI.