Entre el puerto del Toro y las Conchas de Haro se extiende una columna montañosa que se alza altiva sobre la vertiente meridional del valle del Ebro y los boscosos enclaves del área septentrional. Este sector de la sierra de Cantabria o Toloño representa el más meridional de los conjuntos montañosos de Euskal Herria, y congrega cimas tan populares como Palomares (1.466 m) o Toloño (1.271 m). Al margen del cortante filo de las cumbres también hallamos rincones de soberbia belleza, como el valle de Inglares, o poblaciones con la impronta arquitectónica de lejanos tiempos. Así, desde las alturas de las cumbres hasta las orillas de los ríos, no hay desperdicio posible en lo referido al ocio empapado de naturaleza y cultura, un binomio de innegable atractivo.