Hay un hecho constatable y conocido, y es el alto grado de parentesco que se observa entre topónimos de los cinco continentes.
Diccionario para conocer el significado y origen de muchos topónimos.
Descubra las relaciones entre topónimos de diferentes naciones y continentes.
Es sorprendente que pueda haber esta familiaridad toponímica entre el ámbito ibérico y el internacional, desde los países cercanos a los más lejanos. Pero lo más significativo no es el hecho de que la toponimia española esté emparentada con la de éste o aquél país, sino lo que se deduce de los grupos presentados en esta obra afectando al parentesco entre sí de numerosos topónimos de países (Vietnam con Tanzania, Perú con Bangladesh, Japón con Australia, etc.) y regiones (Sudamérica con Asia-Pacífico, Oriente Medio con el África Negra, el Cáucaso con Australia, Extremo Oriente con Norteamérica, etc.), con lengua e historia aparentemente lejanas.
Para que se hayan podido compartir tantos topónimos y que persistan desde épocas antiguas, puede haber dos explicaciones:
a) Hubo una lengua originaria común, que tendría que haber sido cercana al actual euskera (para que desde él se pueda deducir tal parentesco), que se pudo originar en períodos muy antiguos (paleolíticos) y que se mantendría por siglos sin grandes cambios.
b) No hubo una lengua común, pero sí un flujo muy activo en épocas antiguas (que podría situarse desde bastantes miles de años atrás hasta siglos antes de nuestra era actual) con viajes frecuentes e intercambios culturales afectando de modo global y prolongado.
Ambas ideas chocan frontalmente con lo que se nos ha transmitido desde hace siglos y con lo que da por sentado la mayor parte de la humanidad. Pero rechazarlas por eso es algo que nunca puede hacer alguien que se tenga por científico o investigador.
Esta obra se complementa con otras dos de la misma serie: Topónimos y apellidos españoles de origen ibérico o pre-latino (2019) y Topónimos y apellidos ancestrales de los países de la hispanidad (2020).