MIGUEL CALVO REBOLLAR / GUIOMAR CALVO SEVILLANO
"La sal es la piedra preciosa más valiosa que nos ha dado la tierra". Esa era la estimación del gran químico Justus von Liebig, basándose en su importancia como alimento, su utilidad para conservar otros y su papel como punto de partida de una buena parte de las industrias químicas de su época. Todo esto se incluye en este libro y, además, los valores culturales relacionados con su historia, con las luchas para obtenerla, los impuestos, muchas veces arbitrarios y abusivos de que fue objeto, y las consecuencias que todo esto tuvo en la vida de muchos pueblos. De las instalaciones para obtenerla, minas y salinas, nos quedan huellas, en muchos casos milenarias, y, desde luego, espectaculares, transformadas en recurso turístico o en zonas de elevado valor medioambiental.